Ese momento incómodo cuando te das cuenta de que eres egoísta

Esta semana vi un sticker en un coche que decía simplemente: «¡Todo se trata de mí!».

Pensé, ¿en serio? ¿Esa es la declaración que quieres hacer al mundo? De todas las cosas por las que alguien podría tomar partido, como respaldar una causa o una postura política, ¿por qué elegir anunciar su egoísmo? Mientras manejaba, comencé a sentir una convicción que me dio el Espíritu Santo, me enfrenté al hecho de que, con demasiada frecuencia, vivo como si todo se tratara de mí.

A simple vista, soy una persona que da. Trabajo junto a mi esposo en el ministerio estudiantil; como esposa y mamá, paso gran parte de mi tiempo atendiendo las necesidades de los demás, soy voluntaria en la guardería de mi iglesia; pero también paso mucho tiempo pensando y hablando sobre mi tiempo, mis necesidades, mis planes y lo que yo quiero. La verdad es que, la mayor parte del tiempo, realmente quiero que las cosas salgan como yo las planeo; cuando no funciona, me molesta.

Esto se hace evidente cuando examino mi vida de oración. Honestamente, tengo que admitir que quiero que Dios haga las cosas a mi manera y en mi tiempo, no quiero que mi santificación requiera sufrimiento, no quiero que Sus planes de vida sean diferentes a los míos. Con mucha frecuencia vivo como si creyera la mentira de que «todo se trata de mí», pero la verdad de Dios sobre este tema está en total contraste con mi egoísmo.

La realidad es que no se trata de mí, todo se trata de Él, Colosenses 1:16-17 dice:

«Porque en Él fueron creadas todas las cosas, tanto en los cielos como en la tierra, visibles e invisibles; ya sean tronos o dominios o poderes o autoridades; todo ha sido creado por medio de Él y para Él. Y Él es antes de todas las cosas, y en Él todas las cosas permanecen».

Apocalipsis 4:11 dice: «Digno eres, Señor y Dios nuestro, de recibir la gloria y el honor y el poder, porque Tú creaste todas las cosas, y por Tu voluntad existen y fueron creadas».

En el libro «Mentiras que las jóvenes creen», Nancy y Dannah resumen estos versículos de la siguiente manera: «El mundo no fue creado para girar alrededor de nosotras. Todo el universo fue creado para girar alrededor de Cristo. Si nuestro objetivo en la vida es ser felices, aceptadas o amadas, entonces cualquier cosa que amenace nuestro bienestar será un enemigo, un obstáculo para cumplir nuestro objetivo». 

¡Uf, esto me golpea como un balde de agua fría! He notado que frecuentemente vivo como si mi objetivo en la vida fuera ser feliz y aceptada, y ciertamente reacciono mal cuando ese objetivo se ve amenazado. Esto puede llevarnos a la esclavitud.

Si mi objetivo principal es ser feliz, rápidamente me esclavizo a aquello que me brinde esa felicidad momentánea, pero si reconozco a Dios como el centro (en lugar de a mí misma), encuentro libertad. «Por otra parte, una vez que estamos de acuerdo con Dios en que existimos para Su placer y Su gloria, podemos aceptar todo lo que llegue a nuestra vida como parte de Su voluntad y propósito soberanos. No resentiremos, resistiremos ni rechazaremos las “cosas difíciles”, sino que las aceptaremos como “amigas”, diseñadas por Dios para hacernos como Jesús y para traer gloria a Él» (Mentiras que las jóvenes creen).

Más allá de reconocer que Cristo es el centro, la Biblia nos llama a poner las necesidades de los demás por encima de las nuestras.

Filipenses 2:3-4 dice: «No hagan nada por egoísmo o por vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de ustedes considere al otro como más importante que a sí mismo, no buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás».

No solo no somos el centro del universo, sino que estamos bastante abajo en la jerarquía. Debemos vivir de una manera que demuestre que Cristo y Su voluntad son lo más importante, luego están las necesidades de los demás. No hay mucho espacio para ser egoístas si seguimos ese orden, así que estoy pensando en invertir en un nuevo «sticker» que diga algo como esto: «Todo se trata de Jesús: mis padres, mis hermanos, mis amigas, mi pastor, mis compañeros de trabajo, mis compañeros de clase, mis vecinos…» bueno, ya entiendes la idea.

¿Y tú? ¿Estás viviendo de una manera que comunica que tu mundo gira alrededor de Cristo y de los demás? ¿Hay rincones de egoísmo en tu vida que anuncian «todo se trata de mí»? ¿Te resulta difícil rendir tus planes a los planes de Dios o a las necesidades de los demás? ¿Cuáles son algunas formas prácticas en las que puedes vivir esta verdad durante la semana?

Ayúdanos a llegar a otras

Como ministerio nos esforzamos por hacer publicaciones de calidad que te ayuden a caminar con Cristo. Si hoy la autora te ha ayudado o motivado, ¿considerarías hacer una donación para apoyar nuestro blog de Joven Verdadera?

Donar $3

Sobre el autor

Erin Davis

Erin Davis es una autora, bloguera y oradora a la que le encanta ver a mujeres de todas las edades correr hacia el pozo profundo de la Palabra de Dios. Es autora de muchos libros y estudios bíblicos, incluidos … leer más …

¡Hey chicas! Nos encanta escuchar de ustedes, pero nos sentimos limitadas por las formas en que podemos ayudarlas.

Si buscas consejo te animamos a hablar primero con tu pastor o una mujer piadosa en tu vida, ya que ellos sabrán más detalles de ti y te darán seguimiento y ayuda.Lo publicado en la sección de comentarios no necesariamente refleja el punto de vista de Aviva Nuestros Corazones.

Nos reservamos el derecho de remover opiniones que puedan no ser de ayuda o inapropiadas. Puede ser que editemos o removamos tu comentario si: * Requiere o contiene información personal como emails, direcciones, teléfonos. *Ataca a otras lectoras. * Utiliza lenguaje vulgar o profano.


Únete a la conversación