Nancy Leigh DeMoss: En nuestros días, se pueden contratar profesionales casi para cualquier cosa, desde reparar tu computadora hasta podar el pasto. Especialmente, se nos ha entrenado para llevar nuestros problemas emocionales a los expertos, buscando profesionales y pastillas para resolver los problemas del alma y del espíritu.
Hay un lugar para sicólogos y terapeutas, si su consejo está basado en la Palabra de Dios. Pero recuerda las palabras de Santiago 5:
¿Sufre alguno entre vosotros? Que haga oración… ¿Está alguno entre vosotros enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia y que ellos oren por él…Confesaos vuestros pecados unos a otros, y orad unos por otros (Santiago 5:13-14, 16).
Santiago dice que cuando estás sufriendo, primero dejes que el cuerpo de Cristo te ministre gracia. Pídeles que oren contigo. Confiesa cualquier pecado que pueda estar causando enfermedad o debilidad emocional, y comienza a rendir cuenta a otras creyentes.
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