
Matrimonio ≠ Meta Final Parte 2
En el episodio anterior hablamos sobre el matrimonio como un pacto sagrado y cómo nuestra fe juega un papel fundamental en su propósito y diseño. Pero hoy queremos ir un paso más allá y hablar sobre una realidad que muchas veces se ignora: el matrimonio no es solo una etapa bonita de la vida, sino un llamado que debe tomarse con seriedad. ¡Acompáñanos en el episodio de hoy!
Aquí te compartimos algunas frases y versículos del episodio de hoy:
- El matrimonio fue diseñado por Dios para moldearnos y santificarnos. Es una herramienta que el Señor usa para volvernos más santos y llevarnos a ser más como Cristo.
- El matrimonio es hermoso, es divertido, es emocionante, pero no es algo que deberíamos tomar a la ligera, ya que es un compromiso de fidelidad, amor y sacrificio de por vida.
- El mundo nos vende la idea de que el matrimonio es el …
En el episodio anterior hablamos sobre el matrimonio como un pacto sagrado y cómo nuestra fe juega un papel fundamental en su propósito y diseño. Pero hoy queremos ir un paso más allá y hablar sobre una realidad que muchas veces se ignora: el matrimonio no es solo una etapa bonita de la vida, sino un llamado que debe tomarse con seriedad. ¡Acompáñanos en el episodio de hoy!
Aquí te compartimos algunas frases y versículos del episodio de hoy:
- El matrimonio fue diseñado por Dios para moldearnos y santificarnos. Es una herramienta que el Señor usa para volvernos más santos y llevarnos a ser más como Cristo.
- El matrimonio es hermoso, es divertido, es emocionante, pero no es algo que deberíamos tomar a la ligera, ya que es un compromiso de fidelidad, amor y sacrificio de por vida.
- El mundo nos vende la idea de que el matrimonio es el «final feliz» o la gran meta de la vida, pero la verdad es que el final feliz solo existirá cuando veamos a nuestro Salvador otra vez. Mientras tanto, somos obras en construcción por manos del Alfarero.
¿Cómo podemos recordar que nuestra identidad y propósito en Dios van mucho más allá de nuestro estado civil?
- Así como el matrimonio es un diseño hecho por Dios, la soltería también es un diseño de Dios.
- Nuestra meta final no es ni el matrimonio ni la soltería, es honrar al Diseñador en cualquier etapa que nos encontremos. Nuestro llamado principal es ser más como Cristo.
- Lo que importa es que estés glorificando a Cristo en medio de tu estado civil, siendo santa en toda área de tu vida y en toda situación en la cual Él te ha colocado, sea en un matrimonio o en la soltería.
- Lo que anhela el corazón de Dios es que seamos santificadas, perfeccionadas y más semejantes a la imagen de Cristo, y eso se puede abrazar, ya sea dentro del llamado del matrimonio o el llamado de la soltería. En ambas etapas somos santificadas, moldeadas y perfeccionadas.
- Los planes de Dios son perfectos, aun cuando no van acorde a nuestros deseos. No tenemos forma de conocer los planes de Dios por adelantado, entonces debemos vivir el aquí y el ahora para la gloria de Dios.
- Dios es soberano, Él tiene un propósito para tu vida y Él te tiene en la situación en la cual te encuentras por una razón. ¡Aprovéchala al máximo!
¿Cómo podemos construir relaciones que no solo estén basadas en emociones o atracción, sino en principios sólidos que reflejen la intención de Dios para el matrimonio?
- No creas las mentiras del enemigo y ora para que el Señor te dé un entendimiento eterno de tu propósito como mujer, en cualquier etapa de tu vida.
- Recuerda que las emociones son dadas por Dios, son parte de Su diseño. Son como notificaciones de nuestro Dios sobre cómo el mundo exterior afecta nuestro mundo interior. Es bueno estar atentas a ellas, pero lo que no podemos hacer es dejarnos guiar por ellas.
- Pídele a Dios que guíe tus emociones y te ayude a interpretarlas correctamente.
- La única manera de conocer la verdad es estar cerca y constantemente expuesta a ella, y esto solo se vive rindiendo nuestra perspectiva egoísta del matrimonio y abrazando la verdad que nos hace libres.
Para reflexionar:
- Dios es soberano, Él tiene un propósito para tu vida y Él te tiene en la situación en la cual te encuentras por una razón. ¡Aprovéchala al máximo!
- El matrimonio no debe ser la meta final de una cristiana, sino una oportunidad para reflejar el amor de Cristo y vivir para la gloria de Dios. La cultura ha distorsionado el concepto del matrimonio y muchas personas lo ven como una carga en lugar de un llamado divino.
- Recuerda que tanto la soltería como el matrimonio son diseños de Dios, y que la verdadera satisfacción se encuentra en cumplir Su voluntad, no en tu estatus civil.
- «Porque esta es la voluntad de Dios: su santificación…». —1 Tesalonicenses 4:3
- «Escudríñame, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis inquietudes. Y ve si hay en mí camino malo, y guíame en el camino eterno». —Salmo 139:23-24
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Episodio, Glorifica a Dios en tu soltería
Serie, Matrimonio sagrado
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