
Día 56 | Deuteronomio 17 – 20
¿Qué aprendiste de tu lectura de estos capítulos? Escribir con nuestras palabras lo que aprendemos nos ayuda a reflexionar. A medida que lees este devocional, puedes comparar y enriquecer tu aprendizaje.
Leímos que:
1. La misericordia y la justicia son importantes para Dios. Estos atributos debían caracterizar el pueblo que Dios había elegido.
Hasta aquí hemos visto cómo Moisés, dirigido por Dios,estableció una serie de reglamentos que tenían el fin de regular la vida y las actividades cotidianas del pueblo con relación a la adoración de Dios, las relaciones, los negocios, las deudas, los juicios y la aplicación de la justicia, etc.
2. Dios hace múltiples provisiones para asegurar el orden público, aplicar la justicia y cuidar los derechos de los ciudadanos. Nota la provisión que hace para el pecado humano, para nuestra naturaleza caída. El pueblo fue provisto con ciudades de refugio hacia donde correr cuando alguien mataba a …
¿Qué aprendiste de tu lectura de estos capítulos? Escribir con nuestras palabras lo que aprendemos nos ayuda a reflexionar. A medida que lees este devocional, puedes comparar y enriquecer tu aprendizaje.
Leímos que:
1. La misericordia y la justicia son importantes para Dios. Estos atributos debían caracterizar el pueblo que Dios había elegido.
Hasta aquí hemos visto cómo Moisés, dirigido por Dios,estableció una serie de reglamentos que tenían el fin de regular la vida y las actividades cotidianas del pueblo con relación a la adoración de Dios, las relaciones, los negocios, las deudas, los juicios y la aplicación de la justicia, etc.
2. Dios hace múltiples provisiones para asegurar el orden público, aplicar la justicia y cuidar los derechos de los ciudadanos. Nota la provisión que hace para el pecado humano, para nuestra naturaleza caída. El pueblo fue provisto con ciudades de refugio hacia donde correr cuando alguien mataba a alguien más involuntariamente. En estos lugares, las personas que habían cometido asesinato accidentalmente podían refugiarse de aquellos que buscaban venganza (Dt. 19).
- De acuerdo al siguiente texto, ¿quién es nuestro refugio seguro hoy al cual podemos correr con confianza? Responde leyendo el siguiente texto:
«Por lo cual Dios, deseando mostrar más plenamente a los herederos de la promesa la inmutabilidad de Su propósito, interpuso un juramento, a fin de que por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios mienta, los que hemos buscado refugio seamos grandemente animados para asirnos de la esperanza puesta delante de nosotros. Tenemos como ancla del alma, una esperanza segura y firme… Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna».
–Hebreos 6:17-19; 4:16
Como leímos en Números, Cristo es un mejor refugio porque no solo nos libra de la condenación, sino que paga la deuda por nosotros y nos declara libre de culpa.
3. De nuevo vemos que Dios advierte contra las costumbres paganas: las prácticas ocultas o espiritistas, la adivinación, hechicería, la adoración del sol y la luna, etc. (17:3-4; 18:10-12). El pueblo de Dios debía vivir separado de la cultura pagana que los rodeaba.
4. Dios instruye acerca de cómo elegir un rey. Ellos eran un pueblo cuyo Rey era el Señor (teocracia) pero Dios sabía que eventualmente querrían hacer como los pueblos vecinos y poner su propio rey.
Lee las instrucciones que se dan sobre esto en los versículos 17:14-20.
- ¿Crees que los reyes humanos llenaron estos requisitos? ¿Saul (ver 1 Sam. 15)? ¿Salomón (ver 1 Reyes 10-11)?
- ¿Quién fue el único y verdadero Rey de los judíos? Mira lo que dice Mateo:
Aunque en burla, los soldados pusieron un letrero sobre su cabeza cuando fue crucificado:«ESTE ES JESÚS, EL REY DE LOS JUDÍOS» (Mt. 27:37). Pero tres días después resucitó en victoria, ascendió al cielo y está sentado en Su trono a la derecha del Padre, y gobierna como Rey de reyes y Señor de señores (Fil. 2:8-11).
5. Dios promete un profeta mayor en el futuro (vv. 18:15-22)
- Alguien que hable las palabras de Dios.
- Alguien de entre el pueblo; uno de ellos.
- Alguien que hable por Dios y que hable todo lo que Dios le mandare.
- Alguien a quien todos debían obedecer.
El pueblo debía aprender a discernir entre verdaderos y falsos profetas. Si una profecía no se llevaba a cabo, ese profeta debía morir.
«Por tanto, arrepiéntanse y conviértanse, para que sus pecados sean borrados, a fin de que tiempos de alivio vengan de la presencia del Señor, y Él envíe a Jesús, el Cristo designado de antemano para ustedes. A Él el cielo debe recibir hasta el día de la restauración de todas las cosas, acerca de lo cual Dios habló por boca de Sus santos profetas desde tiempos antiguos. Moisés dijo: “El Señor Dios les levantará a ustedes un profeta como yo de entre sus hermanos; a Él prestarán atención en todo cuanto les diga. Y sucederá que todo el que no preste atención a aquel profeta, será totalmente destruido de entre el pueblo”. Asimismo todos los profetas que han hablado desde Samuel y sus sucesores en adelante, también anunciaron estos días».
–Hechos 3:19-24
- De acuerdo a este texto, ¿a qué Profeta apuntaba Dios en Deuteronomio 18?
6. Moisés establece leyes sobre la guerra.
¿Qué te llamó la atención? A mí me llama la atención que se hacían exenciones para aquellos que se ofrecían voluntariamente para el servicio militar:
- El que acababa de edificar una casa nueva.
- El que acababa de plantar una viña.
- Los recién casados que no habían consumado su matrimonio.
- Los temerosos y pusilánimes, porque contaminaban a los demás con su temor.
Como siervas de Dios, como Sus discípulas, estamos en medio de una gran guerra espiritual (Ef. 6:10-13). Si queremos tener victoria en la batalla, debemos estar totalmente consagradas al Señor, luchar con las armas que Él ha provisto y confiar totalmente en Su poder para librarnos.
- ¿Cómo se relaciona el siguiente texto a lo indicado más arriba y a tu vida hoy?
«El soldado en servicio activo no se enreda en los negocios de la vida diaria, a fin de poder agradar al que lo reclutó como soldado». –2 Timoteo 2:4
- ¿Cuáles son esas cosas en tu vida que capturan tu tiempo y corazón y no te permiten servir al Señor de manera consagrada?
- ¿Qué le recordó Dios al pueblo cuando se atemorizaban ante sus enemigos? (ver 20:1).
- ¿Cómo te alienta esa promesa a ti hoy?
«Yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo». –Mateo 28:20
Para meditar:
- A la luz de lo leído, ¿adornas el evangelio practicando la justicia y la misericordia mirando a Cristo y rindiéndote cada día a Él?
- Según lo que escribiste sobre lo aprendido, ¿qué más aprendiste después de leer el devocional?
«Oye, Israel, hoy ustedes se acercan a la batalla contra sus enemigos; no desmaye su corazón; no teman ni se alarmen, ni se aterroricen delante de ellos, porque el Señor su Dios es el que va con ustedes, para pelear por ustedes contra sus enemigos, para salvarlos». - Deuteronomio 20:3-4
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