Enseña a tus hijos a leer la Biblia

Tener conversaciones sobre la Palabra de Dios con nuestros hijos no se trata solo de una rutina familiar, sino de una oportunidad diaria para guiarlos hacia Cristo. Hoy queremos compartir contigo algunas preguntas sencillas que pueden ayudarte a crear momentos significativos en los que juntos descubran quién es Dios y cómo Su Palabra transforma nuestras vidas.

Frases destacadas del episodio de hoy:

Preguntas básicas sobre el pasaje leído

«¿Qué está pasando aquí?»

• Esta pregunta los guía a describir lo que han entendido con sus palabras y les da apertura para que pregunten por algo que no entendieron. 
• No se trata de una clase para que respondan bien o mal, sino de juntos crear comunidad. 
• Esto es valioso, porque les estás enseñando a tus hijos sobre el evangelio y los estás discipulando, pero no como una mera actividad cristiana, sino porque así luce la vida de padres cristianos que buscan enseñar a sus hijos quién es Dios, y que la salvación se encuentra en Cristo.

«¿Qué creen que significa lo que hemos leído?»

• Esta pregunta es para saber qué entendieron.

 «¿Ven alguna característica de Dios o cómo Él está obrando?» 

• Señalar alguna característica de Dios o cómo Él respondió, para observar cómo Él sigue siendo el mismo ayer, hoy y siempre.

«¿Qué podemos poner en práctica?»

• Aquí se les recuerda que no solo se trata de hacer buenas obras, sino de pedirle al Señor que les ayude a hacer esas buenas obras, y que es por la fe en Cristo que podemos hacer lo que hemos leído en la Palabra. 

«¿Qué pasaje vamos a memorizar?»

• Escoger un pasaje para que toda la familia memorice durante la semana.
• Tener este tiempo con tus hijos te permite conocerlos, un tiempo por el que puedes dar gracias a Dios aunque no siempre sea perfecto. Dios es fiel, y Él puede usar ese tiempo para crear un hábito en la familia.
• Ese tiempo no se trata solamente de un día, ni de hacerlo en comunidad, ni de solo los domingos, sino que Dios es nuestra vida y Él es nuestro lenguaje, y el evangelio nuestro mensaje. 
• Ningún tiempo con tus hijos alrededor de la Palabra es en vano; no importa tanto la cantidad de tiempo, sino tu constancia cada día en recordarles para quién viven, quién es Dios y lo que ha hecho en Cristo. 
• No hay mayor herencia que dejarles a tus hijos la enseñanza de la Palabra de Dios, confiando en que Él hace la obra. Busca el mejor tiempo para hacerlo, ora por tus hijos, pídele al Señor sabiduría y cómo unirte a lo que Dios ya está haciendo en el corazón de tus hijos. ¡Persevera!
• Busca al Señor con todo tu corazón para amar a tus hijos de manera que los guíes a Él constantemente:

- Guárdalos de las filosofías de este mundo que los llaman a verse y a confiar en ellos mismos.

- Adviérteles de las mentiras de la cultura sobre quiénes son y quién es Dios.

- Ayúdalos a escoger, como María, la mejor parte: estar sentado a los pies de Jesús. 

Pasajes bíblicos para ser alentada:

• «Escucha, oh Israel, el Señor es nuestro Dios, el Señor uno es. Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza. Estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón. Las enseñarás diligentemente a tus hijos, y hablarás de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes. 8 Las atarás como una señal a tu mano, y serán por insignias entre tus ojos. Las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas». —Deuteronomio 6:4-9

Recursos recomendados:

Episodio, La mente y el corazón

Episodio, Sé fiel en entrenar a tus hijos

Blog, Cómo ayudar a los adolescentes a estudiar la Biblia

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