
Mamás distraídas: un llamado al enfoque y a la fidelidad
Distracciones. Nos afectan a todas sin importar nuestra edad y a veces no nos damos cuenta. Vivimos en un mundo lleno de ofertas, de oportunidades y de mensajes que nos dicen que podríamos estar haciendo «algo más», «algo mejor», «algo más productivo». En medio de todo eso, es fácil perder de vista nuestro llamado principal en esta etapa: criar y entrenar a nuestros hijos y servir a nuestra familia.
Frases destacadas del episodio de hoy:
- La maternidad es una asignación divina, una tarea que Dios concede por un tiempo. Pero a veces, sin darte cuenta, pudieras estar invirtiendo tu energía en cosas que parecen buenas y productivas, pero que no son lo mejor en este momento.
- Ser fiel no es hacer grandes cosas para Dios, sino ser constante y obediente en lo que Él ya te ha encomendado. Es obedecer en lo pequeño, en lo cotidiano, …
Distracciones. Nos afectan a todas sin importar nuestra edad y a veces no nos damos cuenta. Vivimos en un mundo lleno de ofertas, de oportunidades y de mensajes que nos dicen que podríamos estar haciendo «algo más», «algo mejor», «algo más productivo». En medio de todo eso, es fácil perder de vista nuestro llamado principal en esta etapa: criar y entrenar a nuestros hijos y servir a nuestra familia.
Frases destacadas del episodio de hoy:
- La maternidad es una asignación divina, una tarea que Dios concede por un tiempo. Pero a veces, sin darte cuenta, pudieras estar invirtiendo tu energía en cosas que parecen buenas y productivas, pero que no son lo mejor en este momento.
- Ser fiel no es hacer grandes cosas para Dios, sino ser constante y obediente en lo que Él ya te ha encomendado. Es obedecer en lo pequeño, en lo cotidiano, en lo que muchas veces pasa desapercibido para otros, pero que construye un legado eterno.
Distracciones de hoy que obstaculizan tu enfoque y fidelidad
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Uso excesivo de redes sociales: provoca la comparación, pérdida de tiempo y ejerce una influencia negativa.
- La constante exposición a vidas «perfectas» en Instagram, TikTok y YouTube puede generar en ti insatisfacción que te lleve a buscar más.
- Experimentarás la presión de ser una «mamá influencer» o de documentar cada momento en redes. Todo eso te va a llevar a la distracción y a perder el enfoque.
- Cultura del «Éxito personal»: las metas personales mal priorizadas (la carrera, los proyectos que quitan tiempo a la familia).
- La cultura actual está sembrando la idea en las madres jóvenes de que una mujer solo es valiosa si sigue creciendo profesionalmente, si gana mucho dinero fuera del hogar o si se involucra en algún emprendimiento propio.
- Transmite el mensaje de que «ser mamá solamente» no es suficiente y que debería estar «haciendo más». Esto genera distracción porque lleva a las mamás a enfrascarse en cosas que quizás no corresponden a la etapa de vida en la que están.
- Sobrepreocupación y activismo
- Llenar la agenda con demasiadas actividades: voluntariados, grupos, clases y compromisos fuera de casa.
- Inscribir a los niños en múltiples actividades por miedo a que «se queden atrás», sacrificando el tiempo en familia.
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- Cuando tratamos de vivir múltiples etapas en una, olvidamos que Dios tiene un tiempo para cada cosa.
- Recordatorio en medio de un constante activismo: Es la fidelidad y la perseverancia, aunque parezcan lentas o improductivas, las que no llevan hacia el propósito de Dios. La maternidad no es una carrera de velocidad, ni de logros, ni de competencia con otras, sino un maratón de resistencia y de compromiso diario.
- Búsqueda de validación en la cultura y en la aprobación de los hombres, en lugar de la aprobación de Dios.
- Hacer cosas por la apariencia (tener la casa perfecta, los hijos perfectos y el matrimonio perfecto), en lugar de enfocarte en lo que Dios considera importante.
- La tentación del entretenimiento excesivo
- Pasar demasiado tiempo en Netflix, YouTube, novelas o pódcast en lugar de invertir en la crianza y en las labores del hogar.
- La Falta de disciplina y hábitos saludables
- No tener estructura en el día y dejar que el tiempo se diluya en cosas triviales.
- No establecer prioridades claras, lo que lleva a la frustración y al desorden.
- La ansiedad por el futuro
- Preocuparse demasiado por la educación de los hijos, la economía o el bienestar de los hijos, en lugar de confiar y descansar en la provisión de Dios.
- Dejar que el miedo dicte decisiones en lugar de la fe.
- Como mamá joven, debes evaluar y reconocer si estas ofertas o tentaciones y metas personales están presentes en tu vida, y reconocer si esto te ha llenado de distracción y desenfoque.
La fidelidad bíblica
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La fidelidad equivale a vivir ordenada y responsablemente; se trata de obediencia constante en la dirección correcta.
- Una persona fiel sigue a Dios, obedece constantemente, tiene claridad en sus metas y tiene propósito en todo lo que hace.
- Una persona fiel reconoce la importancia de las pequeñas decisiones diarias en la construcción de hábitos y patrones de vida.
- La fidelidad no es solo un sentimiento, es una disciplina que se demuestra a través de la obediencia constante a lo que Dios ha encomendado para ti en cada etapa.
Cómo luce la fidelidad en la maternidad
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Ser fiel en asumir con seriedad y perseverancia la tarea de criar y formar a tus hijos, reconociendo que este es un llamado divino y no simplemente una tarea más en tu apretada agenda.
- La fidelidad implica decir «sí» a esta tarea todos los días, aun cuando no veas resultados inmediatos. La Biblia nos enseña que Dios recompensa la obediencia, aunque en el momento no siempre parezca fructífera.
- La fidelidad se manifiesta en lo cotidiano: mientras cambias pañales, mientras te levantas en la noche para alimentar a tu bebé, mientras los disciplinas constantemente, mientras hacer tareas rutinarias en tu hogar cada día sin ver las recompensas inmediatas.
- La fidelidad implica criar con intención, tomando en serio la responsabilidad de guiar a nuestros hijos en el camino del Señor. Esto no sucede de forma automática, sino a través de decisiones diarias:
- Estableciendo rutinas saludables en el hogar.
- Enseñando la Palabra de Dios, los valores de Dios y los principios bíblicos con tu ejemplo y tus palabras.
- Priorizando la relación con nuestros hijos por encima de distracciones externas.
- Protegiendo el ambiente espiritual del hogar de influencias negativas.
- Cuando asumes con responsabilidad tu labor, estarás invirtiendo en el futuro de tus hijos y en la eternidad. Estarás preparando flechas para ser lanzadas hacia el futuro.
- Estás llamada a ser fiel a pesar del cansancio y lo rutinario:
- Muchas veces tu maternidad se sentirá monótona, agotadora y hasta a veces invisible; incluso sentirás que estás sola. Sin embargo, Dios te ve y Él ve cada acto de amor y sacrificio.
- La fidelidad no se mide en eventos grandes, sino en las pequeñas decisiones diarias:
- Dios ve cuando eliges responder con paciencia en lugar de frustración.
- Dios ve cuando tomas tiempo para orar y leer la Palabra con tus hijos.
- Dios ve cuando sigues enseñando y corrigiendo, aun cuando parece que no escuchan.
- Tu fidelidad es también un testimonio para tus hijos:
- Tus hijos observan tu vida más de lo que escuchan tus palabras. Si quieres que sean fieles a Dios, debes modelar esa fidelidad en tu propia vida.
¿Cómo, entonces, te mantienes enfocada y fiel en tu llamado?
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Evalúa tu agenda: identifica en qué se te va el tiempo en el día.
- Ora, ten comunión con Dios: busca Su dirección cada día. Deja que tu mente sea transformada de acuerdo a las prioridades de Dios, a lo que Él considera importante y necesario en esta etapa
- Cultiva la disciplina y crea hábitos saludables: ordena tu vida, no sucumbas ante el caos. Toma control poco a poco de tu rutina.
- Recordar que aunque no haya recompensas inmediatas, hay frutos eternos.
- La maternidad es una asignación divina que requiere compromiso, enfoque, perseverancia y amor; Dios te da Su gracia.
- Ser fieles en este llamado significa asumir la responsabilidad con gozo, sabiendo que cada acto de obediencia cuenta. No permitas que la cultura o las distracciones te desvíen de esta misión tan importante.
- Recuerda que la fidelidad no se trata solo de grandes momentos, sino de la constancia en lo pequeño, sabiendo que Dios es quien te ha llamado y Él ha prometido estar contigo cada día, y ha prometido fortalecerte en el camino.
Pasajes bíblicos para ser alentada:
«No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no te das por vencida». —Gálatas 6:9 (pf, NVI)
Recursos recomendados:
Episodio, El plan de Dios para la familia
Episodio, Disfruta de ser mamá con tu mirada en lo eterno
Blog, Maternidad se deletrea oportunidad
Blog, La maternidad en el plan redentor de Dios
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