Necesitas aprender a perseverar

Hoy en día muchas jóvenes, casadas y solteras, manifiestan un entendimiento equivocado acerca de las expectativas ante la vida. Han creado en sus mentes un escenario «ideal», que en realidad está formado por las ideologías del mundo y por su propio corazón engañoso. Y cuando esas expectativas no se cumplen, ¡se derrumban! Quieren tirar la toalla y abandonar la carrera. 

Pero la biblia nos llama a soportar, a perseverar bajo las pruebas. Es parte fundamental del llamado de toda mamá cristiana. ¡Veamos lo que Laura nos comparte sobre esta perspectiva!

Frases destacadas:

• La vida será trabajosa de este lado del cielo. Somos parte de un mundo caído que espera y anticipa la redención de todas las cosas.
• Cuando estamos en Cristo, cuando hemos creído en el evangelio, cuando Él nos ha rescatado de las tinieblas para plantarnos en el reino de Su luz; ahora inicia una obra de restauración, ahora Él pone en nosotros el deseo de glorificarle y vivir para Él.
•  En la maternidad encontrarás obstáculos que se interpondrán. Tendremos que luchar contra nuestro pecado y contra el pecado de los demás. Y el llamado de la crianza de los hijos es uno donde esa batalla se experimenta de manera muy particular. ¡La lucha es real!
• En medio de tus luchas y pruebas, cuando el enemigo te ataca con pensamientos para desanimarte… ¡Dios te llama a perseverar en la carrera que Él ha puesto delante de ti!

«Amados, no se sorprendan del fuego de prueba que en medio de ustedes ha venido para probarlos, como si alguna cosa extraña les estuviera aconteciendo. Antes bien, en la medida en que comparten los padecimientos de Cristo, regocíjense, para que también en la revelación de Su gloria se regocijen con gran alegría. Pero si alguien sufre como cristiano, que no se avergüence, sino que como tal glorifique a Dios.». —1 Pedro 4:12 y 13, 16

• Si estás sufriendo privaciones, cansancio, irritación, limitaciones económicas, el cuestionamiento de otros y de tu propio corazón, desánimo, dudas acerca de si has elegido el camino correcto, problemas relacionales… ¡no te avergüences! ¡Glorifica a Dios en medio de esto! 
• Somos privilegiadas si de alguna manera compartimos los padecimientos de Cristo. Tus limitaciones tienen propósito, tu dolor tiene propósito, tu cansancio tiene propósito, tu sacrificio, tiene propósito, tus circunstancias difíciles tienen propósito en las manos de Dios.

Recuerda hoy:

• ¡Hay una recompensa! ¡No desfallezcas! 

«No nos cansemos de hacer el bien, pues a su tiempo, si no nos cansamos, segaremos». (Gal. 6:9) La maternidad está en el corazón de Dios y es el llamado que Él te ha encomendado en este tiempo. Sus propósitos y sus planes son siempre buenos. 

• Es necesario permanecer corriendo para obtener el premio.

Dice Hebreos 10:36: «Porque ustedes tienen necesidad de paciencia, para que cuando hayan hecho la voluntad de Dios, obtengan la promesa».

• Las pruebas y el sufrimiento nos preparan para la vida venidera.

Nosotras debemos estar dispuestas a sufrir por el reino de Dios.

• ¡No corras sola!

Corre la carrera con otras a tu lado que puedan animarte a perseverar, y ¡tu animarlas a ellas! Es importante que seas parte de tu iglesia local, que veas las vidas de otras mamás, que otras puedan hablar verdad a tu vida, que puedan retarte y animarte, y tú hacerlo con ellas.

• Aprende a esperar y descansar en Dios. Habita en la Palabra. 

Todo lo que vale la pena cuesta trabajo, vive tu llamado fielmente y espera en Él. Él te dará la gracia que necesitas. Él es tu oportuno socorro, corre a Él. La Palabra de Dios es tu fuente de esperanza mientras corres.

Recursos recomendados:

• Libro, «Maternidad redimida»

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