Justo esta semana estaremos envueltas en celebraciones navideñas y es muy probable que tengamos cenas, intercambios de regalos, conciertos navideños y muchas razones para estar en familia. Pero quiero alertarte del terrible riesgo que corremos al poner a un lado el verdadero motivo para celebrar en esta época. ¡Dale a play!
¡Si Jesús no está en la escena nada, absolutamente nada tiene sentido!
Fue la llegada de Cristo que iluminó a un mundo en tinieblas, Él vivió sin pecado y cada día de su vida se encaminó a su muerte, la que tú y yo merecíamos y cuando resucitó nos otorgó la libertad de la esclavitud del pecado. Eso es lo que celebramos en Navidad, que Cristo es la luz del mundo pero todavía hay un pueblo en tinieblas que necesita ser alcanzado... de eso se trata todo.
Comparte con nosotras en la sección de comentarios algunas ideas para mantener a Cristo en el centro en estos días de celebración. ¡Nos encanta saber tu opinión!
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